La causa de la piel opaca a menudo se debe a una acumulación de células de la piel muerta que oscurecen su luminosidad natural y a agresores ambientales, como la contaminación y la exposición a los rayos UV, que pueden agravar la opacidad de la piel al causar estrés oxidativo, lo que lleva a una tez con palidez. La deshidratación también juega un papel, ya que la falta de hidratación puede hacer que la piel luzca plana y opaca, al realzar las líneas finas y las zonas ásperas. Más allá de los factores físicos, la piel opaca también puede estar relacionada con hábitos de estilo de vida, como la falta de sueño y la alimentación, que afectan la rotación de células.