A menudo, los tipos de piel mixta necesitan un cuidado más personalizado para tratar diferentes problemas en distintas zonas del rostro. Para limpiar, un gel limpiador facial espumoso suave remueve las impurezas sin eliminar los aceites naturales. Use un exfoliante suave con ácido salicílico para prevenir la congestión y obstrucción de poros, y mejorar la textura. Aplique tratamientos específicos, como un suero aclarador en la zona en T y máscaras hidratantes en las zonas secas para personalizar aún más el cuidado. Opte por humectantes en gel o a base de agua, no comedogénicos y con ingredientes como ácido hialurónico y escualano para pieles mixtas para hidratar sin obstruir los poros, especialmente en la zona en T. Trate las zonas secas de las mejillas con ingredientes como escualano o ceramidas en fórmulas no comedogénicas que pueden brindar hidratación sin aumentar la oleosidad. Para pieles mixtas, también se puede optar por adaptar las rutinas de cuidado de la piel a los cambios estacionales, como la humedad en verano y la resequedad en invierno, o a cambios en el estilo de vida, como la alimentación y los factores ambientales, que pueden exacerbar la oleosidad y la resequedad.